lunes, julio 30, 2007

PARAFILIAS (EXTRAIDO DE LA RED) 1ª PARTE




































ME HA PARECIDO CURIOSO LEER SOBRE LAS PARAFILIAS. COMO SE PODRÁ OBSERVAR HAY TODO UN MUNDO ALREDEDOR DE LA EXCITACIÓN SEXUAL. COMO SON TANTAS LAS PARAFILIAS RECONOCIDAS Y ESTUDIADAS, LO VOY A EXPONER POR PARTES Y EN ORDEN ALFABÉTICO PARA NO CANSAR AL POSIBLE LECTOR. ALGUNA DE ELLAS, SE PODRÍA ENCLAVAR DENTRO DEL MUNDO DEL BDSM.
CREO QUE EL SABER NO OCUPA LUGAR, Y AUNQUE NOS PUEDA HACER GRACIA ALGUNA DE ELLAS, EL RESPETO DEBE PREVALECER POR ENCIMA DE TODO; PORQUE QUIZÁ ENCONTREMOS ALGUNA O ALGUNAS QUE TENGAMOS Y NO NOS ATREVAMOS A DECIR O RECONOCER.
En la sexología moderna hay dos maneras de definir el término “parafilia”:

1) El deseo patológico hacia personas que no consienten o a las que se les produce algún daño. Por ejemplo la pedofilia, el sadismo, el exhibicionismo y el voyerismo son orientaciones patológicas del deseo.

2) La necesidad obsesiva de realizar ciertas conductas sexuales normales (lo que la psiquiatría del siglo pasado llamaba aberraciones, perversiones o conductas desviadas) como la masturbación, la homosexualidad tanto masculina como femenina, la bisexualidad, la transexualidad, la gerontofilia (y su versión femenina, la graofilia) y el sexo oral (cunilingo, anilinguo y felación), por nombrar algunos. Lo que determina la parafilia es la necesidad de realizar exclusiva y obsesivamente estos actos para lograr el placer sexual.

La liberación sexual de los años sesenta ha contribuido a enmarcar la idea de “parafilia” a situaciones más concretas y delimitadas. Hasta mediados de los años setenta, la Asociación Estadounidense de Psiquiatría consideraba desviado a todo acto sexual que no fuera la penetración del pene en la vagina. Desde entonces esa asociación ha tratado de actualizar permanentemente –a la luz de las últimas investigaciones y progresos en este campo– el listado de lo que antes se consideraba un trastornos psicológico.

Tenga presente que esta lista posee un propósito meramente informativo, como una mirada educativa y entretenida hacia el potencial sexual humano. En el campo de las fantasías sexuales una persona perfectamente sana puede tener muchos intereses superpuestos.

Abasiofilia: La excitación sexual sólo se produce cuando la pareja es coja.

Acomoclitismo: Excitación por los genitales depilados.

Acrofilia: Personas que se excitan sólo cuando sus parejas son muy altas.
Acrotomofilia: Fetichismo por las amputaciones. Maticemos que lo que pone a esta gente no es el acto de la amputación en sí, sino el muñón ya cerradito del miembro que falte.
Actirastia: Excitación sexual proveniente de la exposición a los rayos del sol.
Acucullofília: Excitación sexual por los penes circuncidados.

Adiestramiento animal: Los juegos AT (sus siglas en inglés -animal training-) más pervesos implican que una o más de las parejas del acto sexual interpreten el papel de un animal. El más recurrido es el papel de perro, pero parece que los caballos también son bastante populares. El “animal” puede imitar el comportamiento de la bestia o acicalarse con artículos propios del Reino Animal como collares, bozales, bridas y demás. En cualquier caso, estas criaturas no pueden circular por la autopista.

Agonophilia: Excitación proveniente de una lucha con la pareja.

Agorafilia: Atracción por la actividad sexual o el exhibicionismo en lugares públicos.

Agrexofilia: Excitación producida por el hecho de que la actividad sexual sea oída por otras personas.

Albutofilia: Excitarse sexualmente al pensar en baños o duchas calientes. Hay gente para todo. Algofilia: Excitación producida pro el dolor (Se diferencia del masoquismo por la ausencia del componente erótico).

Alopelia: Experimentar un orgasmo sólo viendo a otros teniendo una relación sexual. Alorgasmia: Excitación proveniente de fantasear durante el acto sexual con otra persona que no sea la pareja.

Alveofilia: Atracción por tener relaciones sexuales en una bañera.

Alvinolagnia: Atracción sexual sólo por los estómagos.

Amaestramiento: Se trata de un término perteneciente al BDSM y consiste en entrenar a una compañera sumisa para que sea obediente.

Amaurofilia: Preferencia por tener una pareja sexual ciega o a la que se le han vendado los ojos. Amelotasis: Atracción sexual hacia personas con ausencia de algún miembro.

Amiquesis: Excitación sexual al rascar a la pareja durante el acto sexual.

Amokoscisia: Excitación por el deseo de castigar a la pareja sexual.

Amomaxia: Excitación sólo al realizar una relación sexual dentro de un automóvil estacionado. Anaclitismo: El acto de alcanzar la excitación sexual mediante actividades a las que uno estaba expuesto cuando era niño. Estas actividades pueden ser que te enseñen a hacer pipí en su sitio, que te coloquen unos patucos o que te pongan a jugar con muñecas.

Anastimafilia: Personas a las que les excita el sobrepeso de los demás.

Androginofilia: Atracción sexual por personas andróginas.

Androidismo: Excitación con muñecos o robots con aspecto humano.

Andromimetofilia: Atracción sólo por las mujeres vestidas de hombres.

Anisonogamia: Atracción por una pareja sexual mucho más joven o mucho mayor.

Anofelorastia: Excitación al profanar objetos considerados sagrados.

Antolagnia: Excitación por oler flores.

Apotemnofilia: Excitación por la idea de ser amputado.

Aracnofilia: Juego sexual con arañas.

Asfixiofilia: Se la llama también estrangulación erótica. Consiste, básicamente, en jugar a estrangular a la pareja sexual. Esta perversión erótico-festiva es la que acabó con algún que otro miembro del Parlamento británico y, curiosamente, del partido conservador. La equipación mínima para practicarla suele ser un lazo o soga al cuello, una naranja en la boca y unos calcetines blancos…

Astenolagnia: Atracción por la humildad, la humillación o la debilidad sexual ajena.

Audiolagnia: El estímulo principal proviene de la audición.

Autagonistofilia: A diferencia del exhibicionista (la persona afectada muestra intencionadamente sus genitales a otra persona que ni se imagina lo que se le viene encima), un autagonistofílico crea situaciones en las que otras personas puedan verle desnudo por accidente. Por ejemplo, puede que le dé por dejar las cortinas abiertas y pasearse desnudo por la casa o caerse en bolas por la ventana de la habitación.

Autoabasiofilia: El estímulo es estar o volverse cojo.

Autoasasinofilia: Fantasía masoquista de ser asesinado.

Autoasesinofilia: Las personas a las que les va esta perversión se excitan sexualmente cuando se colocan en situaciones en las que podrían acabar muertas.

Autoasfixiofilia: el estímulo es ser asfixiado durante el acto sexual.

Automamada: A buen lector, pocas palabras bastan.

Automisofilia: atracción por ser ensuciado o corrompido.

Autonepiofilia: el estímulo es utilizar pañales y ser tratado como un bebé.

Autopederastia:. Obsesión, que se da sobre todo en los años de la pubertad, en la que al sujeto en cuestión le da por intentar metersela pitolina por el ojete.

Autoungulafilia: Conseguir placer rascándose sus propios genitales.

Avisodomía: Relación sexual con aves.

Axilismo: Masturbación dentro de la axila de la pareja.

Backswinging: Es el folleteo anal de toda la vida (analismo) pero aquí el factor clave y diferenciador es que se disfruta a saco cuando la mujer está tumbada sobre su estómago. Balloning: placer sexual que se obtiene sólo al ver mujeres hinchando globos, explotándolos, montándolos, estirándolos y jugando con ellos.

Barosmia: excitación por el olfato.

Basoexia: Excitación sólo producida por los besos.

Bastinado: Se trata de una forma de tortura o de castigo en la que se dan palizas en las plantas de los pies de la “víctima”. Según se cuenta, ésta fue una de las técnicas sexuales favoritas de los jefazos nazis, quienes, además de pasados de rosca, estaban más calientes que el pico de una plancha.

BDSM: Se corresponde a las siglas inglesas de bondage, disciplina, sadismo y masoquismo.
Belonefilia: Se trata de un fetichismo que puede llegar a ser algo peligroso ya que el protagonista se pone como una moto por el uso de pinchos, agujas y piercings más o menos elaborados.
Biastofilia: Aquellos que sólo se excitan sexualmente cuando asaltan a alguien contra su voluntad.

Blastolagnia: Persona atraída por mujeres muy jóvenes.

Blumpy: Esta perversión consiste sencillamente en que te hagan una mamada mientras estás en el baño cagando. Sin duda es más excitante que leer el Marca. El que se la casca mientras caga es simplemente un ejemplo de chezolagnia.

Bukake: Se trata de una perversión tan japonesa como el Tamagotchi y consiste en masturbarse en grupo encima de una mujer. La protagonista, además, suele estar enterrada de tal manera que sólo se le ve la cabeza.

lunes, julio 23, 2007

DOMINA VIRTUAL

HUMOR BDSM

MI SOÑADA SECRETARIA

CONTROL Y ADORACIÓN

ADORACIÓN BOTAS

SOBRE LA DOMINACIÓN Y LA SUMISIÓN (EXTRAÍDO DE LA RED)




























































A CONTINUACIÓN TRANSCRIBO UNA BUENA EXPOSICIÓN SOBRE LA DOMINACIÓN Y LA SUMISIÓN QUE ME HA PARECIDO MUY INTERESANTE. PROVIENE DE LA PÁGINA WEB http://www.ecstagony.com/, Y RESULTA MUY DIDÁCTICA PARA TODAS LAS PERSONAS QUE DESEEN SABER Y APRENDER SOBRE EL BDSM.

Los juegos de BDSM no son acerca de dolor y humillación, ni siquiera de sexo (aunque puedan incluir ambos) sino acerca de un intercambio de poder. Desde luego, para que un intercambio de poder sea posible debe haber por lo menos dos participantes. BDSM no es para solitarios.En esos juegos de intercambio de poder hay dos roles: uno va a representar el dominante, el que recibe el poder, da las órdenes y propina los castigos, y el otro el sumiso, el que entrega el poder, el que va a ser mandado y castigado. Estos papeles son interpretados por hombres y mujeres en similares porcentajes.

No es verdad que las mujeres son sumisas y los hombres dominantes.Por la forma en que nuestra civilización se desarrolló todos estamos familiarizados con los roles de dominante y dominado. En toda la historia hubo reyes y nobles y gente común, señores y siervos, amos y esclavos, el conquistador y el conquistado. Los roles tradicionales de padres e hijos y esposo y esposa eran de este tipo. Durante la mayor parte de la historia fue así la relación entre los sacerdotes y su congregación, como lo es aún en algunos grupos culturales. Y aún ahora, en las democracias, con leyes y Constituciones, es la relación entre el gobierno y los ciudadanos en cuanto los funcionarios pueden salirse con la suya, aún cuando signifique invertir los roles legales, en los cuales los ciudadanos se supone que están al mando.

Así que cualquiera puede entender por qué alguien puede encontrar satisfacción en ser el dominante, ya que ellos tuvieron a lo largo de la historia todos los beneficios, pero pocos fuera de BDSM pueden entender porque alguien puede querer ser un sumiso, el que es usado y abusado. La diferencia entre BDSM y al vida real es que en la vida real los roles nunca son consensuados. Los que están al mando lo están porque tienen la fuerza, ya sea mejores armas, mayor fuerza física, los deseos supuestos de Dios, o los votos de la gente (aún cuando traicionen sus expectativas) y pueden usar ese poder para su sola satisfacción. En BDSM el dominante obtiene su poder sobre el sumiso porque el sumiso se lo otorga. El sumiso da su consentimiento para ceder el control al dominante. Y da su consentimiento porque disfruta siendo sometido.

La idea de consentimiento es fundamental para entender BDSM. No sólo es la diferencia entre los roles usuales de dominante y dominado y nuestras fantasías, sino también la diferencia entre los juegos de BDSM y el abuso. En la vida real, tal como en los personajes de sádico y masoquista como los ve la psicología, el dominante es el jugador activo, que puede hacer casi lo que quiera, con pocas restricciones, para obtener su satisfacción. El dominado es pasivo, teniendo que aceptar y sufrir lo que quiera el dominante, porque no tiene otra opción. No para nosotros.

Los dos roles son activos, ambos están buscando obtener lo que quieren del juego. Durante la negociación antes de una escena los dos cooperan en fijar las reglas y los límites y el sumiso da su opinión respecto a como se debe representar la escena, que le gusta y que no le gusta, que quiere y que no quiere, y que espera obtener del juego. Aún durante la escena a menudo el sumiso da indicaciones (que a veces parecen órdenes, en lo que se llama “topping from the bottom”, mandar desde abajo) acerca de que le debe hacer o no el dominante. Y siempre tiene la palabra de seguridad, por si el juego le parece demasiado exigente. Así que, lejos de ser usado para la satisfacción del dominante, el sumiso está disfrutando el juego, a menudo usando al dominante para su satisfacción. Y en última instancia es el sumiso, no el dominante, quien tiene el control, el que va a aceptar o no lo que se le puede hacer, no importa que quiere el dominante.

Usualmente es más fácil para un sumiso obtener lo que quiere, ya que es más fácil convencer a alguien de que le haga a uno algo, aún si no le gusta, que convencer a alguien de que se deje hacer algo que no le divierte. Es más fácil, por ejemplo convencer a alguien de que le dé a uno una paliza, aun si no es lo suyo, que convencer a alguien que no disfruta de ello de que se deje pegar.

De acuerdo, un “dominante reacio”, que representa su rol como un favor al sumiso, no es lo mismo que un dominante real, porque aún si puede hacer los gestos no va a dominar de la forma en que el sumiso desea ser dominado, pero al menos es algo, y la imaginación del sumiso puede, hasta cierto punto, proveer lo que falta. En un juego consensuado no puede haber un “sumiso reacio”, porque no se puede presionar a alguien para que se someta. Estaría muy cerca de ser abuso.

¿Qué obtiene el dominante de su papel? Lo que Ud. sospecha. Es bueno ser el amo, tener a alguien en sus manos, es bueno ver la derrota en su rostro, sus ojos llorosos, hacer lo que uno quiere por algún tiempo. En una pareja con relación cercana, es bueno sentir la confianza del otro, la responsabilidad de cuidar al otro. Nunca se siente uno más cerca de su pareja que cuando la tiene en sus manos, aceptando el sufrimiento y la humillación como un regalo para uno.Pero no se puede abusar de otra persona,por lo que uno debe encontrar alguien que disfrute del rol complementario. Para un sádico real el consentimiento y el hecho de que el otro está disfrutando arruinarían el placer.

¿Por qué un sumiso acepta ceder el poder? Porque mucha gente disfruta, de cuando en cuando y bajo condiciones estrictamente limitadas, de renunciar a la carga de la responsabilidad. Por un momento, uno no es responsable de lo que está ocurriendo, puede dejarse llevar y guiar. No necesita decidir; el dominante lo hará por Ud. No necesita pensar, sólo obedecer. Para adultos modernos como nosotros, hombres o mujeres, que deben estar siempre en control y tienen muchas responsabilidades, someterse puede sentirse como un regreso a la despreocupación de la niñez, cuando alguien lo cuidaba y decidía por Ud. (y a veces lo castigaba). Y retornar a la infancia es un sueño que sólo se puede cumplir en la fantasía. También está la alegría de darse Ud. mismo como regalo para el placer del otro, confiando en que el otro no lo va a lastimar, sino que va a hacer lo que Ud. disfruta, el placer de recibir al otro como regalo, saber que confían en Ud. Para la gente a la que esto le gusta es la verdadera expresión del “soy tuyo” y “eres mío” al nivel más profundo. Así que, lejos de uno obtener el placer abusando el otro, ambos obtienen el placer de una experiencia compartida. Y de eso se trata BDSM.

EL EMBLEMA BDSM Y SU SIGNIFICADO


El emblema de BDSM fue creado para ayudar a la gente que está en el juego a reconocerse entre sí. No se cuánta gente lo usará (si hay alguno) pero pienso que podría ser divertido.

El emblema no es de uso libre, el autor lo tiene registrado, pero ha cedido el derecho de uso para fines no comerciales. Para fines comerciales, o en la duda, consultarlo.


Está basado en un triskele, triskel or triskellion (en plural triskelia or triskeles) palabra latina derivada del griego “triskelês”: tri=tres + skelos=pierna (de tres piernas) que fue usado como símbolo religioso por los griegos, los romanos y los celtas (aún hoy).

El emblema fue inspirado por el mecanismo de reconocimiento usado por los miembros de la Sociedad de Roissy, de la novela “Historia de O” de Pauline Reage. En el primer capítulo, lo describe así:


“curiosos anillos de hierro, con un círculo interno de oro, con el sello grande y pesado, como el de los caballeros, pero más abultado, que tenía, incrustado en oro, una especie de rueda con tres rayos, cada uno de los cuales formaba una espiral, semejante a la rueda solar de los celtas.”


Otra vez, en el Capitulo II cuando O recibe los anillos permanentes en su vulva, de los anillos cuelga
“un disco del mismo metal... en una de sus caras, un Triskel incrustado en oro”.


Y finalmente, en el capítulo 5, suprimido originalmente y luego publicado por separado como “Retorno a Roissy”, dice:


“el hombre extiende una mano abierta con una medalla en la palma, que muestra, en hierro con un fondo de oro, el triskel de Roissy”.

El significado


Esto es lo que dice el creador del símbolo.

"El emblema de BDSM no tiene un significado "obvio" porque fue creado para ser enigmático. Para el observador común (vainilla), que podría ser ofendido por BDSM, es solamente una pieza atractiva de joyería. Por lo tanto, lo podemos usar como un saludo amistoso, un guiño, para otros aficionados que nos encontremos en las veredas y los pasillos de nuestra vida diaria.

Para el que sabe, sin embargo, el emblema está lleno de significado.

Las tres divisiones representan los varios tríos de BDSM. Primero, B&D, D&S, y S&M. Luego, el triple credo de BDSM: Seguro, sensato y consensuado. Finalmente, las tres grandes tendencias de la comunidad: top (activo, el que golpea), bottom (pasivo, el que recibe) y switch (el que disfruta actuando a veces de uno y a veces de otro).

Es este tercer simbolismo el que le da el significado a los tres agujeros que aparecen en cada sección. Como BDSM es por lo menos un estilo de juego, y como máximo un estilo de amor, los agujeros representan que cada individuo en el contexto del juego es incompleto. No importa cuán "completo" y "entero" uno crea ser, queda un vacío en uno que sólo puede ser llenado por alguien complementario. BDSM no puede ser un juego solitario.

El parecido con una variación triple del signo del Yin-Yang no es accidental. Así como los bordes curvos de Yin y de Yang representan el nebuloso borde entre el fin de uno y el comienzo del otro, así los bordes curvados en éste representan las divisiones poco definidas entre B&D, D&S, y S&M.

El metal y el color metálico del medallón simbolizan las cadenas e hierros de la propiedad / servidumbre de BDSM. Los tres campos internos son negros, representando una celebración del lado oscuro de la sexualidad BDSM.

Las propias líneas curvas pueden ser vistas como un dibujo estilizado de un látigo moviéndose o incluso un brazo levantándose para propinar una palmada erótica. El círculo que rodea todo, desde luego, representa la unidad de todo ello y la singularidad de una comunidad que se protege a sí misma."

Tenga Cuidado. Si piensa reproducir el emblema, hágalo bien. Lo que hace a un Triskele el emblema de BDSM es:
Los rayos y el borde son de un color que denote metal, sea este oro, plata o hierro. Los bordes y rayos son de un ancho uniforme, y rotan en la dirección de las agujas del reloj. Los campos interiores son negros. Las marcas en los campos son agujeros (se debe ver el fondo a través de ellos) y no puntos.

Ese es el Triskele registrado para BDSM, y al que su propietario autoriza a reproducir con fines no comerciales. Si Ud. usa otra variación, y acierta con una registrada por alguien más, se arriesga a un juicio por violación de copyright.

Muchísimas organizaciones usan versiones del Triskele como emblema. No trate de hablar de nalgadas con nadie que no tenga el emblema correcto. Podría ser un druída celta, un ejecutante de tambores budista o un miembro del departamento de transportes de EE.UU., entre muchas otras cosas.

Extraído de la página web ecstagony.com